Las dudas sobre la honestidad de Keiko Fujimori, el origen del dinero que utiliza para financiar sus campañas, su poca experiencia laboral y su paso intrascendente por el Congreso.
Financiamiento de sus estudios
Keiko es acusada de estudiar
en Estados Unidos con el dinero que su padre tomó ilícitamente de las
arcas del Estado. La versión fujimorista para justificar los gastos de sus estudios en la Universidad de Boston es que su padre vendió un inmueble en Surco a 669 500 dólares, y usó esos fondos para la educación de sus hijos.
Sin embargo, La República denunció en el 2009 que Fujimori inventó la venta del inmueble
para justificar los gastos en educación. Dos peritajes judiciales
confirmaron que la venta de la casa de Surco fue una operación ficticia.
Rifa sospechosa
La lideresa de Fuerza Popular aseguró que
parte del dinero para su campaña presidencial del 2011 lo obtuvo gracias
a una rifa que realizó con apoyo de los miembros de su partido. A
través de la presunta rifa afirmó que consiguió 1 millón 606 mil 310 soles.
Sin
embargo, existen suficientes indicios para dudar de la veracidad de ese
sorteo. Lo que se sabe es que de los 12 premios que presuntamente se
sortearon, solo uno llegó a su afortunado ganador. No se conoce tampoco
quiénes fueron los otros 11 “afortunados”. El premio mayor, un auto
Chevrolet, nunca fue reclamado.
Y la supuesta rifa no fue lo único cuestionable sobre el financiamiento
de su campaña, pues el año pasado se descubrió que Central Media SAC,
empresa vinculada a Rivera Ydrogo (amigo del investigado Martín Belaunde
Lossio y ex gerente de Antalsis), aportó a la campaña electoral de Keiko.
Sin experiencia laboral
Recientemente, Pedro Pablo Kuczynski, su rival político de cara a las elecciones del 2016, recordó que Keiko Fujimori
“no tiene experiencia en gestión pública”. Esa afirmación tiene
sustento, pues la lideresa de Fuerza Popular nunca alcanzó ningún cargo
en el Estado por meritocracia. Solo tuvo un paso intrascendente como
congresista y cumplió con el rol de primera dama cuando su papá fue
presidente.
A ello se suma a que su experiencia laboral en el
ámbito privado también resulta cuestionable para una persona que quiere
ser presidente. Según la información oficial que dio al Jurado Nacional
de Elecciones, solo lideró dos ONG (cuando fue primera dama) y luego fue
accionista en Summit Products hasta el 2008.
Cuestionamientos por la casa que habita
En el 2013, la bancada parlamentaria de Perú Posible pidió investigar a Keiko
por vivir en la casa de una prófuga de la justicia peruana. El inmueble
que ocupaba le pertenecía presuntamente a su tía, la fugitiva Rosa
Fujimori, acusada de corrupción.
Keiko, sin embargo, aseguró que
esa casa en realidad era de sus primas. Luego, en una entrevista con
Magaly Medina, varió su versión anterior y explicó: “Vivo acá desde el
2000. He criado a mis hijas acá. Mi tía está afuera y yo aprovecho para
cuidar la casa”.
El fujimorismo explicó que lo que quiso decir Keiko
fue que la casa le pertenecía a su tía Juana, no a Rosa. Sus
partidarios olvidaron que Juana Fujimori también fue acusada de
complicidad, peculado y asociación ilícita para delinquir. Su abogado,
sin embargo, consiguió que esos delitos fueron declarados prescritos.
Faltas en el Congreso
Keiko fue congresista en el periodo
2006-2011 y se caracterizó por sus constantes y prolongadas ausencias.
En los primeros cuatro años de su labor legislativa ya había alcanzado
400 inasistencias. Eso no fue todo, pues durante el periodo legislativo
2009-2010, solo asistió a siete sesiones de las 42 de la Comisión de
Economía del Congreso, grupo de trabajo del cual fue titular desde julio
del 2006.
El equipo de Keiko
De la mano de Keiko, llegaron al Congreso Alejandro Aguinaga, investigado por el caso de esterilizaciones forzadas;
Cecilia Chacón, investigada por enriquecimiento ilícito; Julio Gagó,
suspendido del Parlamento por 120 días tras ser acusado de evadir la Ley
de Contrataciones del Estado; y Martha Chávez, suspendida del
Parlamento por 120 días tras alterar el orden público durante la toma de
mando de Ollanta Humala.
A ellos se suman Rofilio Neyra,
procesado por mentir en su hoja de vida presentada ante el Jurado
Nacional de Elecciones; y Alejandro Yovera, desaforado del Congreso y
condenado judicialmente a dos años de prisión suspendida por delito
contra la administración pública.
Entorno familiar
Keiko tiene a su papá preso por delitos de
lesa humanidad y corrupción, y a su tía prófuga de la justicia tras ser
acusada de enriquecimiento ilícito. Pero eso no es todo, el padre y los
hermanos de su esposo, Mark Vito Villanella,
fueron arrestados en Estados Unidos bajo cargos de evasión de impuestos
por 244 000 dólares en junio del 2000. Recibieron tres años de libertad
vigilada, según informó la cadena Univisión.